martes, 19 de abril de 2011

Semana Santa, el beneficio del contexto


Antes de seguir leyendo, aclaro al lector que mi opinión puede ser suceptibe de ataques o condenas religiosas, para lo cual pido se tome como una mera opinión o simplemente abandonen esta lectura.

Esta Semana Santa me trae, por el contexto en el que me encuentro, un beneficio nada despreciable, en mi caso, dos días de descanso que a su vez aprovecharé para pasarlo conmigo y con la gente que aprecio y amo. Pero al recordar este beneficio, también cobran vida muchas de mis conclusiones antagónicas para algunos: "la religión es una forma absurda de dividir la energía universal que nos conecta a todos".

El ser humano a diferencia de los demás "animales ", se caracteriza por dar explicación en la medida de lo posible a cuanta cuestión se le presente, la pregunta es, ¿para qué? Considero que el motivo principal obligado reside en la necesidad de que la gente actúa con base en lo que cree y lo que ha comprobado, de ahí las explicaciones.

Los "animales" no conocen las explicaciones; empero, saben que cuando beben agua sacian su sed, aunque no sepan biologicamente que bien les hace o de que manera interactúa con su cuerpo. Pero el hombre nos explica su esructura molecular, sus estados, nos dice que es incolora e inclusive nos afirma que sin ella sería fatal; les puedo asegurar que el cuerpo humano sabe esto aunque no se lo expliquen y lo entiendan o no, siempre buscarán tomar agua.

No quiero parecer que me he alejado del tema central, aquí concreto lo siguiente: los animales viven en equilibrio porque lo llevan en su naturaleza, el hombre por otro lado vive desequilibrado aún con explicaciones, con deducciones, teorías, divisiones , con "religiones".

¿Semana Santa? ¿Para quién? ¿Por qué? ¿Cuándo? Deberíamos preocuparnos por nuestro bienestar para poderlo transmitir a los demás y buscar la felicidad y el equilibrio.

La Semana Santa me recuerda vacaciones y que bajo mis circunstancias me da tiempo para departir con los míos y detenerme a observar con detalle el mundo en el que vivo.

martes, 12 de abril de 2011

Tratado I Sobre el Universo

El Universo para mí es una energía, una poderosísima energía. Quizá se hable de varias formas en las que se manifiesta la energía, pero el Universo es en sí la única y más maravillosa forma de existencia.

No creo en Dios, tampoco me califico de Ateo y por supuesto no creo en el Diablo, a veces me he encasillado en llamarme agnóstico; eso es ya bastante limitante para cualquier ser humano con aspiraciones de conocimiento.

La sabiduría es el canal que se nos dio para poder recibir esta energía, aunque en realidad jamás la recibimos, si no que en realidad nos conectamos y cerramos el canal de comunicación con la madre energía.

Los seres humanos están cegados, son parte de un ciclo de ciclos, cuando el humano se extinga, el canal de energía se cerrará completamente, sin dar cabida a ninguna especie más de tipo terrestre.

La pena y el dolor no son ni serán jamás castigos para el ser humano, el Universo siempre es energía que está dispuesta a colarse en cualquier persona, sin embargo, el ser humano se empeña, se enfrasca en energías que a veces han cambiado, que han tomado otra dirección y que lejos de comprenderlo, se aferran más y más, lo que les destruye químicamente el cuerpo y les resta tiempo de calidad.

Incluso el dolor es una experiencia necesaria de la vida, pero no una enfermedad crónica. Como seres aptos para el “saber”, a nuestro modo caprichoso pero necesario; debemos estar satisfechos y libres para descifrar cada misterio de la vida, sólo así el dolor y la pena duran muy poco y se aprenden a disfrutar y a entender.

El amor es la debilidad del ser humano, es un sacrificio auténtico, implica pena y dolor nata a él, no se puede amar sin experimentar angustia y otros “padecimientos del alma”. El precio que se paga por el amor es superior a cualquier otro, pero hablando de dualidades, trae consigo en su polo opuesto a la Felicidad, la materia prima que constituye la energía del Universo, traducido a un lenguaje humano, por supuesto.

Se puede apostar a que si no amamos no correremos riesgos, pero en realidad esto es una mera falacia, el humano desde que nace está atado al amor, y cuando el amor va más allá de un ser humano, entonces el amor pasa a términos materiales, fatales y vanales, pero allí sigue.

El amor es una conexión entre dos personas o más, pero se traduce en sentimientos. La atracción y su consiguiente reproducción (sexo) es parte del desequilibrio necesario que se sembró en el hombre, pues a pesar de ser un ser que disfruta de éste, increíblemente lo ha llevado en muchas ocasiones a desgracias a través de su historia.

Dejar de actuar por miedo a algo es a lo que llamo “falta de esperanza”. Aunque parece complicado, existe una forma para abordar la falta de esperanza y actuar, lo primero es estar seguro de lo que uno siente y después ser valiente para tomar decisiones; esto aplica a todo ser que sea humano.

Saber ceder o bien tolerar es un canal de energía positiva, el tener claro el poder de estas acciones son muchas de las respuestas que muchos se niegan a aceptar, y negarlo es como liquidar nuestra felicidad y dar mucha vida a la pena y el dolor, el coraje y la desgracia, envidia y avaricia, al perfeccionismo absurdo; energía negativa finalmente.

La energía madre fluye hacia una dirección siempre, aunque no lo parezca, a veces pensamos que se está desviando, que nuestro camino es uno y para siempre. Sabiduría es lo que necesitamos para descifrar la forma en la que nos llevará y a donde nos conducirá, sin oponernos, la energía nos dará sorpresas inimaginables y claro está, agradables.

En la tierra hay personas guiadas por la energía madre y a su vez estas guían a otras. Es importante saber que el poder de la mente viene de la energía, pero es finalmente el cuerpo quien la conduce a su modo, por ello la energía madre muchas veces es corrompida para tornarse negativa y destructiva.

Todo ser humano tiene una guía espiritual, física y emocional, esta guía por lo general se busca en la gente, cuando en realidad esta gente no es más que un espejo de lo que somos, es un canal humano hacia el canal de la energía universal.

No estamos aquí para aniquilar a nadie, ni para ver llegar la muerte con una sonrisa, somos un paseo de la verdad absoluta que sólo el hombre se ha sembrado en la mente para encontrar una razón de vivir.

Finisterre: La simplicidad de lo complejo


A la altura de bandas de Rock Progresivo como Camel o King Crimson, esta banda Italiana nos demuestra la fineza y el vanguardismo de su música. Progresivo puro para iniciarse y también para los más exigentes.

Hablar hoy en día de bandas de Rock Progresivo "modernas" y la cantidad de variantes que existen de ellas, es como hablar de las diversas corrientes de Jazz que predominan en los lugares más recónditos del planeta, pero de entre tantas propuestas, pocas son las que realmente nos ofrecen algo nuevo.

Sobre la banda

Finisterre nace en Italia en el año de 1993 bajo la batuta de Fabio Zuffanti y Estefano Marelli. Quizá en comparación con bandas como Yes, Pink Floyd o King Crimson, es una agrupación de reciente creación; estamos hablando de décadas de diferencia, pero sin duda, de una calidad musical inexorable y de influencias ancestrales.

En su primera aparición, la alineación estaba conformada por Fabio Zuffanti (bajista y vocalista de la banda), Stefano Marelli (guitarras y voz), Boris Valle (teclados), Marco Cavani (batería y percusiones) y Sergio Grazia (flauta, guitarras y coros). Sin embargo, algunos integrantes abandonaron la banda dando paso a otros. La alineación actual es Maurizio di Tollo (batería y percusiones), Agostino Macor (teclados), Stefano Marelli (voz y guitarras), Boris Valle (piano y teclados) y Fabio Zuffanti (bajo y voz).


La palabra Finisterre tiene dos orígenes, uno de ellos es francés (Finistère) y el otro es gallego (Fisterra); ambos provienen del latín y significan "el fin de la tierra". Aún desconocemos el porque esta banda italiana se decidió llamar así, pero parece ser que cuando buscamos en internet sobre este término, lo que menos encontraremos es información sobre la banda que nos compete en este artículo.

¿A qué suena?

Podemos decir que los primeros discos están marcados por un sello de progresivo clásico, temas en su mayoría instrumentales y con un contenido sumamente conceptual. Por el contrario, en su última producción "La Meccanica Naturale" predomina la voz, aunque no deja de ser conceptual, pero la música tiende a ser más neo progresista.


En su mayoría, escucharemos la mezcla de géneros que van desde el jazz, folk, clásica, electrónica, ambient y por supuesto, rock; siempre fusionados de manera impecable y dejándonos ese deseo de escuchar por segunda ocasión cada pieza ejecutada.

Personalmente considero que el sello distintivo de la banda en su época sinfónica - clásica está muy marcada por Fabio, sin embargo, para los últimos álbumes, Stefano comienza a inclinar más la balanza a su favor, sin dejar, de lado, por supuesto, la ineludible genialidad de Fabio. Simplemente escuchemos las producciones que ha hecho por separado Fabio para descubrir como lleva en cada corte una rítmica y sonoridad de un Finisterre muy digerible y más electrónico.